ansape escribió:
El cuadro resultaba aterrador. Cundía la histeria y los gritos que nadie escuchaba. Amplias grietas en las calles se tragaban a las personas que mostraban el terror pintado en sus rostros. La mitad de las casas y edificios estaban en el suelo, y de muchas se desprendía humo a borbotones. Por otro lado, padres desesperados halaban a sus hijos en su afán de escapar de una ola de varios metros de altura que les pisaba los talones. Entonces el artista sonrió satisfecho; todo en orden. Estampó la firma y partió a la exposición.
Un cuadro de terror, Antony, lo único es que podrías ser un poquito más claro al ordenar las palabras:
Amplias grietas en las calles se tragaban a las personas que mostraban el terror pintado en sus rostros.Al leerlo entendí que las amplias grietas de las calles solo se tragaban a las personas que mostraban el terror pintado en sus rostros, no a las otras.
Podría ser:
La gente reflejaba el terror en sus rostros mientras era tragada por enormes grietas que se abrían en las calles.La mitad de las casas y edificios estaban en el suelo, y de muchas se desprendía humo a borbotones.Cuando se habla de una mitad, ser espera saber qué sucedió con la otra mitad. O al menos para no perder la continuidad, enterarse qué sucedió con las
otras:
La mitad de las casas y edificios estaban en el suelo, y de la otra mitad se desprendía humo a borbotones.Pero para no ser tan exactos, pues es difícil cuantificar con tanta exactitud, creo que tendrías que cambiar un poco esa frase sin mencionar cantidades:
Una parte de las casas y edificios yacían en el suelo y de otras muchas se desprendía humo a borbotones.¡La idea es muy buena! y solo al final se desvela la verdad, es lo sobresaliente del cuento.
Blanca